Procrastrinación: cuando no te apetece hacer - Mar de Borja | Psicóloga holística y creativa

Procrastrinación: cuando no te apetece hacer

No sé si a ti te pasa, pero yo estoy un poquito harta de consejos para ponerse a actuar que no me convencen en absoluto. Estoy sobresaturada de ideas múltiples sobre la gestión del tiempo.

Que sí, que ya sé que si no actuamos no nos movemos, pero muchas veces olvidamos las implicaciones relacionadas con ese “no movimiento”.

No sólo es importante actuar, sino también desde dónde lo hago, para qué lo hago y qué es exactamente lo que quiero hacer.

Estas son las 3 preguntas que, en realidad, al responderlas honestamente te van a ayudar a desbloquear la situación.

No todo es pereza, desgana o mala gestión del tiempo. Voy a contarte un caso real para ejemplificarlo.

Hace unos años una mujer joven apareció en mi despacho con una demanda muy clara. Necesitaba terminar el doctorado y no se sentía capaz, se le hacía una montaña.

Alguien podría decirle “vamos a estructurar los días, desglosarlos en pequeñas metas, hacer una sola tarea al día y… “.

Sí, eso también lo trabajamos, pero las cosas no se nos dificultan porque sí. Así que indagamos en la raíz del problema.

En su historia existían varios episodios en el pasado donde había hecho esfuerzos “sobrehumanos” (másteres, trabajos muy exigentes) y había desatendido completamente todas las señales de su cuerpo.

(En otros casos parecidos, la desconexión con las emociones ha sido total para sobrellevar la carga de trabajo)

Cuando no escuchas las señales de tu cuerpo, no te estás respetando y, probablemente, aparezca cualquier tipo de síntoma: falta de motivación, desilusión, apatía, desajustes alimentarios, ansiedad, estrés… Y podría seguir.

Tal vez te estés preguntando cómo se resolvió el asunto de la procrastinación.

La respuesta es muy clara: Dándole significado.

Si no entiendes por qué haces lo que haces es como ir a la deriva, a no ser que sea un acto de fe. Y entonces sí entiendes por qué haces lo que haces.

Me refiero a que si tu cuerpo te muestra señales de desagrado, de aquello que estás tratando de hacer y no lo atiendes, estás completamente atrapad@ en una lucha entre lo quieres y lo que debes.

Y ¿hasta qué punto debes? ¿Quién decide lo que tú debes hacer?

Todos los casos de falta de motivación con los que he trabajado se resuelven buscando en el interior que es lo que sí te motiva.

Aquello que te impulsa a levantar el día y a trabajar al servicio de eso.

Por tu curiosidad, el doctorado fue entregado y aplaudido, pero no hubiera sido posibles sin una redefinición de por qué quería hacerlo, para qué y a dónde le llevaría.

En otras ocasiones se ha resuelto con un cambio de rumbo radical de profesión, porque las respuestas indicaban un deseo extremo de cambio de dirección.

Escucha tu cuerpo, sus señales y préstales atención. La naturaleza es sabia, te muestra tu propio camino. Todas las respuestas están en ti, solo hace falta saber escuchar.

Sabes que siempre estoy si me necesitas.

Si te ha gustado, comparte para que más personas aprendan a gestionar sus emociones y eleven su vibración.

 

 

 

WhatsApp
Facebook
Twitter
LinkedIn
Email
Print
No Comments

Post A Comment